Sunday, January 28, 2007

ESTADO DE DERECHAS

El Mundo/ La Crónica de León/ 26-01-2007
José Luis Garcia Herrero
Estado de derechas

Con mi cansada hermenéutica doméstica y hemeroteca memorial amanezco dispuesto a ver como está el patio: gracias sean dadas a quién sea. Veo cómo se manifiestan uniformados guardias civiles de república, dictadura y democracia -los del romancero lorquiano evocado ahora en el teatro Bergidum- porque no quieren ser militares; tampoco vivir en casas-cuartel cual el novísimo de Ponferrada –raro ‘do ut des’ especulativo- sino en su propia casa. Veo una imagen de orondos cardenales revestidos de negrísimo y púrpura lleno de ringorrangos, que a la vera de la esmirriada vicepresidenta del Gobierno Psoe celebran el blindaje de sus ingresos eclesiales: que este año costará 3,4 euros a cada españolito que su Dios guarde. Veo como el mismo Tribunal Supremo que hace nada declaró que dialogar con Eta no es acto constitutivo ‘de ningún tipo de delito’, ahora sentencia que las juveniles Jarrai-Haika-Segi de la presunta izquierda vasca son parte de Eta, y por ende, a la cárcel ‘ipso facto’. Veo que el equipo Rajoy-Acebes-Zaplana, demócratas de toda la vida y enamorados del Estado de Derecho, o del Estado de Derecha por eso del lenguaje, exigen al Gobierno de España aplicar sin rechistar la política antiterrorista del PP: de palo y tentetieso, sin diálogo ni gaitas, vencedores o vencidos -como Castro- o nos vamos a ver las caras al sol. Veo que desde la fundación en 1959 de Euskadi Ta Askatasuna -ETA- hasta este crispado 2007 ha pasado casi medio siglo; que Eta, resto antifranquista de la Guerra Civil, separatista, abertzale, fascista, terrorista, movimiento vasco de liberación nacional…ha asesinado a más de 800 civiles, policías y militares; y que los daños económicos andan entre 9.000-12.000 millones de euros. Tremendo recuento de víctimas, «viudas de vivos y muertos que ninguén consolará» (Rosalía de Castro). Pero la peste de Eta no puede hacernos olvidar, en cuanto a pérdida de vidas humanas, los 977 trabajadores muertos por accidente de trabajo en el año 2006 -la tasa por cien mil más alta de Europa- en un mercado laboral de incultura, chapuza, economía negra y especulación desmedida. Ni los más de 4.500 fallecidos por accidente de carretera en ese mismo año. Ni los 700 muertos en Irak de cada día después de la bárbara e ilegal agresión de Bush, su pandilla de libertadores y algún que otro ‘Trío de las Azores’.
Como telón de fondo veo una alegoría de vandalismo, okupas, delincuencia, corrupción, violencia, pensionistas de pensión sin derecho a cocina, emigrantes, inflación universitaria española, un campus berciano entre FP de cine y academia privada…
De pronto veo un párrafo del columnista Javier Ortiz, en estas páginas: ‘Por lo que me cuentan, parece que hay bastante gente que se dice: «Con Zapatero, vale: muy mal. Pero es que con el PP, directamente imposible». En fin: ¡Arriba o viva España!, según los idus.

VIDA DE PERROS Y PERRAS

El Mundo/ La Crónica de León/ 19-01-2007
José Luis García Herrero
Vida de perros y perras

Con felicitaciones y aparentes buenos deseos humanos finalizaba el año 1998 y amanecía 1999 con una triste historia de perros asesinados. Ahora -cómo pasa el tiempo- comienza este 2007 con otra de perros. Una, lamentable; otra, pintoresca. Ambos casos nos evocan que desde 1978 existe una Declaración Universal de Derechos del Animal, aunque no ha impedido que el más antiguo compañero del humano, el perro, sea el animal con más frecuencia abandonado, maltratado, utilizado en peleas…Porque a nadie se le pide cuentas, menos en un país como el nuestro tan cruel con todos ellos.
En aquellas fechas, documentado y denunciado, se eliminaron en Ponferrada numerosos perros -quizá más de cien- en la mal llamada guardería municipal, de forma no explicada y al margen de la legislación universal, estatal, autonómica y municipal. Porque el Ayuntamiento es responsable de la recogida de animales abandonados, pero también de albergues adecuados a las necesidades fisiológicas del animal, libro de altas y bajas, atención sanitaria, curación, adopción…y en caso de inevitable sacrificio, bajo control veterinario, no implique sufrimiento. Sin embargo, mientras que el Ayuntamiento de León renovaba el convenio con la Protectora de Animales, en Ponferrada se municipaliza el servicio -qué extraño- se eliminan perros y se anula el Convenio de 1997 con la Protectora Adepa-Bierzo. Así sigue la cosa, sin saber cómo funciona todo el proceso de recogida de perros abandonados, su destino y eliminación física, si procede.
En estas fechas, para que no se diga que la autoridad competente pasa de caca, culo pedo, pis -cantaban Los Punkitos en los ochenta- la siempre muy atenta concejala de medio ambiente, después de un cartesiano estudio crea 12 áreas tituladas ‘pipicanes’ para que perros y perras -ojo con el leguaje sexista- depositen sus heces, y no en aceras y jardines. Esas pequeñas zonas con arena, rodeadas de seto accesible para perro y propietario, tienen señales informativas y bolsas para las cacas. Lo cual, afirma complacida la eximia edil, cubrirá todas las necesidades. Se supone, la noticia no lo dice, que se ha contado democráticamente con dueños y perros bien educados. Pero quedan algunos cabos, incluso generales, sueltos por ahí. Por ejemplo: los accesos a cocheras particulares -mejor llamarlas ‘pipihombres’- especialmente los viernes, sábados y fiestas de guardar. También escuela de educación cívica de ambos sexos para que no depositen escupitajos, chicles, colillas, papeles y otras guarrerías en las aceras. Porque el problema no son los canes, oiga: son las personas y la compleja relación entre unos y otros, unas y otras. Además de que el invento, ensayado en Barcelona, fue un fracaso. Pues ¿quién vigilará y limpiará los 12 limitados ‘pipicanes’ para que sean éticos, estéticos e higiénicos? A saber.

CURARSE EN SALUD

El Mundo/ La Crónica de León/ 12-01-2007
José Luis Garcia Herrero
Curarse en salud

Lo saben las multinacionales farmacéuticas y, por si las moscas, lo repiten sus prospectos con el fin de advertir que los medicamentos pueden tener efectos adversos, problemas leves o graves, raros o frecuentes, lo mismo curan o te hacen polvo esos otros órganos sanos que cada cual tiene por ahí, dentro de sí mismo, incluso sin saberlo. Haciendo comparaciones, al parecer siempre odiosas, uno se acuerda de programas electorales de partidos políticos, los cuales, partidos y programas, al contrario que los prospectos, sólo prometen remedios y venturas, sin una sola advertencia sobre posibles factores perversos sobre la salud social, política y económica del inocente ciudadano que los toma al pie de la letra.
Por ejemplo, sólo por poner un ejemplo, el proyecto electoral Psoe de la Fundación Ciudad de la Energía de Ponferrada, o Capital de la Energía de idem por eso del alfoz comarcal, provincial o regional: a elegir. Lo cual, según dicen, contribuirá mucho a la energía de la Ciudad y del Bierzo, incluso del mundo internacional, con su planta de oxicombustión para la captura sin contemplaciones, procesamiento y ejecución sumarísima al estilo Bush del CO2 y otros gases de efecto invernadero. Esos que generosamente producen Usa y las centrales térmicas esparcidas por este País de Países llamado España: con permiso de la autoridad, competente por supuesto. Es la primera parte de la parte contratante, supuestamente beneficiosa para mejorar el acalorado y letal medio ambiente. Desilusionante para el parado y el empleado a plazos cortos, que ven como la promesa de miles de empleos se queda en un tímido centenar. Pues «esto es un centro de investigación, no es un centro de producción masiva»: precisa el director general de la Fundación berciana, José Ángel Azuara, antes vicepresidente del Consejo de Seguridad Nuclear, y hasta 1995 director general del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat). El cual Centro, para los que no lo sepan, se creó durante el franquismo, en 1951, con nombre de Junta de Energía Nuclear (JEN). Y que hoy sigue, como organismo público adscrito al Ministerio de Educación y Ciencia, con sede central en Madrid y unas 1.200 personas, la mitad expertos universitarios dedicados a proyectos de I+D y otros sociales.
Recuerdo a Unamuno y su teoría de los tres Juanes y tres Tomases. Porque al conversar dos de ellos, Juan y Tomás, en realidad hay seis en la conversación: 1. El Juan real. 2. El Juan ideal de Juan. 3. El Juan ideal de Tomás. 4. El Tomás real. 5. El Tomás ideal de Tomás. 6. El Tomás ideal de Juan. O sea: el que cada uno es; el que se cree ser; el que cree el otro que es. Lo contó magistralmente Pirandello -tan semejante a Unamuno- en su obra «Uno, ninguno y cien mil». Pero en este juego de las apariencias, de ser y parecer, sólo falta saber donde está el truco.

Sunday, January 07, 2007

ASESINATO SELECTIVO

El Mundo/ La Crónica de León/ 5-01-2006

José Luis García Herrero

El asesinato selectivo


Casi todo lo que nos rodea es un enorme entramado de mentiras, ya que la mayor parte de los políticos no están interesados en la verdad, sino en conservar el poder. Por ejemplo, estando perfectamente conocida la persecución de las ideas en la URSS y en toda Europa del Este, los actos criminales de los EEUU han sido registrados de forma superficial, a pesar de que apoyaron, en muchos casos crearon tras la Segunda Guerra Mundial, todas las dictaduras militares de derechas: Indonesia, Grecia, Uruguay, Brasil, Paraguay, Haití, Turquía, Filipinas, Guatemala, El Salvador, Chile…Millares de muertes tuvieron lugar en esos países atribuibles a la política exterior estadounidense. Pero a EEUU le importan un bledo las Naciones Unidas y la legalidad internacional, tienen su propio perrito faldero detrás de ellos: la patética y supina Gran Bretaña. Justificaron la invasión de Irak diciendo que Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva, mantenía relación con Al-Qaeda y con el atentado del 11-S: no era cierto. La invasión de Irak fue un evidente acto de terrorismo de estado, acción militar basada en una sarta de mentiras responsable de la muerte y mutilación de miles de personas inocentes. ¿Cuánta gente hay que matar para ser considerado criminal de guerra, para que Bush, Blair y otros sean procesados por un Tribunal Penal Internacional?
Con motivo del fantasmal juicio y linchamiento de Sadam Hussein he realizado esa sucinta transcripción del extenso discurso pronunciado por el dramaturgo británico Harold Pinter al recibir el Premio Nobel de Literatura 2005. Porque las avanzadas corrientes criminológicas se orientan desde hace unos cien años a que la pena impuesta al delincuente no suponga en ningún caso la pena de muerte. Su irrevocabilidad, además de impedir toda posibilidad de rectificación de frecuentes errores judiciales, bloquea la aplicación de otras sanciones. El Estado, con su exclusivo uso de legítima defensa de la sociedad, tiene la ineludible obligación de proteger la vida y los derechos humanos, pero con esa Ley del Talión entra en absoluta contradicción, igualándose con los delincuentes que vulneran la vida. Por eso la pena de muerte es siempre estúpida e injusta, ya que pretendiendo reparar algo tan bestial como es la destrucción de vidas humanas, responde con un hecho semejante revestido de apariencia legal. Un concepto bárbaro de la justicia que en lugar de resolver el problema de la violencia lo potencia, pues el sentimiento que suscita el despiadado acto suele producir impulsos de martirologio, ‘vendetta’ y más violencia.
Como bien explicó Harold Pinter, pese a las grandes dificultades que existen es necesario denunciar la mentira mil veces repetida. Si esto no forma parte de nuestra ética vital y política, no habrá esperanza alguna de restituir la dignidad como personas.

Tuesday, January 02, 2007

LAS COLUMNAS DEL TIEMPO

El Mundo/La Crónica de León/ Viernes 22-12-2006

José Luis Garcia Herrero

Las columnas del tiempo

Mira por donde se termina el año 2006 en un par de días, aquel que tan largo parecía cuando las doce campanadas abrían el misterio del tiempo por venir, el zigzagueante futuro, las ácidas o dulces uvas de cada día echadas al viento de la libertad. De pronto me ha dado la venada de un paseo por mis propias columnas de los viernes durante ese año, empezando por una estadística simbólica. Colocando las 52 en vertical resulta una columna de 18 metros de altura con unas 125.000 palabras combinadas para contar cosas de la vida que pasa, donde la crítica, también la información, configuran un análisis radical, entendiendo radical por raíces e ideas que pretenden aportar algo, palabras más o menos ajustadas a una realidad que agrada, disgusta o tal vez ni siquiera es realidad.
Trece columnas para hablar de la acción política del urbanismo, del Plan General y las tropecientas alegaciones sin futuro, de la agencia de negocios inmobiliarios Pongesur y sus mil millonarias inversiones, del temor a la especulación y de su hermanastra la epidemia de la corrupción. Seis columnas dedicadas al medio ambiente, el ruido, la contaminación del aire y, claro está, al Prestige y los incendios forestales de Galicia, las riadas, el mar. Una columna a los niños y esos juguetes que a veces divierten y otras, tan peligrosos, matan. Dos a Dios y su representante en la Tierra, singularmente cuando se apareció en Alicante: es un decir. Una al sistema sanitario con dos caras: la fea cuando se llama, como ironizara Amando de Miguel, ‘In-salud’. Tres, y fueron pocas, a la crisis del pequeño comercio tradicional agobiado por esas grandes superficies que tanto miman los neoliberales de acá y los de la Junta de allá. Otras tres a la recuperación de la Memoria Histórica: sí, hombre sí, esa de la Guerra Civil censurada. Cinco columnas a la política neoliberal general y su mimetismo local. Cuatro para comentar los letales efectos de la privatización total de servicios esenciales y estratégicos cuando se entregan a los vaivenes de un mercado que ni es libre ni competitivo, sino manipulado. Quizá por esto, cuatro más para hablar de ricos y pobres, o sea, de unos pocos muy ricos a costa de millones de muy pobres. Dos columnas en defensa de los derechos y libertades, más unos que otros y todos disfrutados a medias. Una columna al enredo de las llamadas lenguas propias, dialectos o simplemente deliciosos arcaísmos sin más. Otra a las loterías y fiestas religiosas en un país presuntamente aconfesional. Seis, y son escasas, sobre el habitual maltrato a los animales, especialmente en la mal llamada fiesta nacional de los toros, afortunadamente en decadencia y abandono por todas las personas a las que les disgusta la tortura como espectáculo.
En fin, eso es todo y ustedes disculpen. Buen fin de año y a esperar las cosas que siempre vienen escondidas en el próximo 2007.

A BOMBO Y PLATILLO

El Mundo/ La Crónica de León / Viernes 22-122006

José Luis Garcia Herrero

A bombo y platillo

Aún no repuestos del viaducto de la Inmaculada Constitución (Labarga dixit) en un Estado al parecer no confesional, un spot televisivo clama desaforado: ¡ya están aquí!, y un grupo de gentes se parapetan para hacer frente a lo que se les viene encima: camellos, ovejas, belenes, arbolitos, lucecitas, turrones, felicitaciones pegajosas, la caraba. Porque son las fiestas de la Navidad, de Fin de Año, de Año Nuevo, de los Reyes Magos: fiestas mitad confesionales, mitad ateas. Por si fuera poco tanta jarana, llega la ludomanía de la Lotería Nacional y las demás en fila. Es el azar, el juego, la esperanza de las gentes del pueblo, pues a los ricos siempre les tocan todas las loterías en el desigual reparto de las plusvalías: a veces negras como carbón de Reyes y de emesepé, negras como la piedra filosofal de los ‘poceros’.
¡Y uno, haciéndose el despistado mientras el espectáculo se acercaba, amenazador e inquietante! Porque hoy, precisamente hoy, cuando esto que escribo a vuela pluma se publique, ya están girando los bombos de la suerte, bailando las bolas de boj y toda la astuta parafernalia de liras, paraguas, tolva, trompeta, copa, tablas…que escenifican el milagro, el número mágico y astral, la combinación esotérica, el dinero: poderoso talismán del que hablara el Arcipreste de Hita, Quevedo, Goytisolo y tantos otros para ironizar de sus efectos. Otra vez hoy, día mágico de los números de oro, pocos serán los elegidos por la suerte y casi todos, cual los Didi y Gogo de Becquett, los que sigan esperando la llegada del Godot misterioso y ausente, quizá la de los Reyes, del Niño, de lo que sea. Porque de este tiempo de peces gordos que beben sin parar agua del río que nos lleva, sólo cabe esperar que la lotería libere de la trama de hipotecas vitalicias, de ese inmenso enredo de habitar casa debida, casa enajenada hasta la jubilación: si llega.
Así se va cayendo como incautos en este tipo de impuestos indirectos que son las loterías todas: la de Navidad, del Niño, la Primitiva, el Bonoloto, la Quiniela, el Cupón de la Once, el Cuponazo, la Cruz Roja…además de los casinos, tragaperras y otras trampas históricas. Y aunque la expresión lúdica del juego ha sido desde antiguo motivo de estudio filosófico, antropológico y religioso, como objeto de recaudación por el Estado es muy reciente. Quién se lo iba a decir a Carlos III cuando importó la lotería de Nápoles en 1763, semejante a la actual Primitiva, modificada en Cádiz en 1812 -¡Viva la Pepa!- para “aumentar los ingresos del erario público sin quebranto de los contribuyentes”. Tan es así, que la esperanza de ser afortunado enmascara el quebranto, y la cosa se extiende por todo el territorio con el nombre de Lotería Nacional: desde 1892 con Sorteo de Navidad. En fin, salud, dinero y amor: decía una canción. Es preciso advertir que el orden de los factores sí altera el producto.