Monday, August 29, 2011

La tourneé de Benedicto XVI



La Crónica de León, 31-08-2011


José Luis García Herrero



Cuando los ambidiestros políticos de valores eternos, sabiendo que todos los caminos conducen a Roma, quieran preparar una concentración para transmitir su mensaje anticrisis no tienen más que proponer la celebración de un día mundial, por ejemplo: día de la juventud, de los parados, de la hambruna, de los enfermos, o cualquier otro evento a propósito. Eso sí, siempre con el nihil obstat de la Conferencia Episcopal Española: la misma de la extensa Carta Pastoral de 1937, con brazo en alto y Cruzada como pretexto. Aquellos ni estos son los curas obreros ni los teólogos de la liberación, ni los de Juan XXIII, que intentaron una apertura hacia el mundo real. Ahora, como antaño, siguen siendo los de Trento los que organizan días de algo para protestar de todo, con un fastuoso decorado y mensaje de sotanas, solideos, birretes, tiaras, mitras, faldamentos y caros complementos de todos los colores; trascendencia y dogma, verdades y creencias inapelables. Con estos argumentos, los políticos de profesión tienen asegurado el lleno absoluto de plazas y calles, especialmente la Puerta del Sol, símbolo de una España plural y laica que nunca termina de hacerse. Recordemos los pasados días de llenazo, confesionario, perdones y sermoneos; con enormes gastos en medio de una crisis financiera de tomo y lomo.
Otra concentración, la del 15-M, dio lugar a que músicos con distintos niveles de formación, de forma espontánea decidieran expresarse de la manera que mejor saben: creando un coro y orquesta “Solfónica”, inspirada en la Novena Sinfonía de Beethoven: un canto a la libertad, la paz y solidaridad entre todos los pueblos; siendo su cuarto movimiento, “Oda a la Alegría”, el mayor ejemplo de que la música es lenguaje universal. Pero muchos políticos profesionales del brazo de los curas de hisopazo, hicieron todo lo posible para impedirlo, unas veces con vallas y otras con sopapo y porrazo, intentaron contener aquella multitud de jóvenes y no tan jóvenes. Increíble, pero cierto. A este paso retrógrado las estrellas giraran otra vez alrededor de la tierra; la sangre no fluirá por las venas y la memoria de Galileo, Copérnico, Descartes, Kleper, y tantos otros será aventada. Pues así cantaba Jorge Krane: “La hoguera tiene qué sé yo, que sólo tiene la hoguera”.


Monday, August 15, 2011

¿El intrusismo privado como solución?



La Crónica de León/ 17-8-2011
José Luis García Herrero

Lo público y privado participan de la carga ideológica y sociológica postulada por una falsa alternativa que se inclina por la opción privada cuando se refiere a sectores estratégicos que han de actuar como impulso de desarrollo económico, lo cual exige grandes inversiones, sólo realizables mediante planificación centralizada. Así, la energía eléctrica en España procede de centrales térmicas e hidroeléctricas, primando el carbón sobre lo nuclear. No cabe duda que la producción de energía eléctrica es un bien público del que no puede prescindir ninguna sociedad, cuyo origen no debe provenir de un suministrador privado con pleno dominio del mercado, pues los medios financieros para la demanda superan la aportación de recursos privados, siendo necesaria la participación de entidades de crédito, muchas veces sin garantía financiera. Por su carácter estratégico y elevadas inversiones a largo plazo, esto exige la intervención estatal, muy lejos de la teoría ultraliberal, defendiendo que el Estado no tenga más misión que la contemplativa en un supuesto libre mercado, fuente de bienestar y riqueza, según dicen. Véase la consecuencia de esa alternativa para concluir que la misión del Estado es realizar lo que es capaz de hacer, cuando los ciudadanos así lo quieran, anota Sarabia, Catedrático de Sociología.
El resultado salta a la vista, dice J. Luis Sampedro: con la caída del muro de Berlín y el derrumbamiento soviético desapareció el único rival opuesto a la brutal expansión del capitalismo global, causante de la red financiera no controlada. Esto explica el abuso de poder y riqueza para dominar el mercado mundial, con resultado de aumentar el abismo entre ricos y pobres, pueblo y políticos de profesión; además de la crisis planetaria como el medio ambiente, genocidio, hambruna y terrorismo de estado. Sin olvidar que las diversas reformas educativas han producido desajustes entre formación profesional y demanda social, más el torpe intrusismo de profesiones sin garantía académica.
Siendo el Estado de Bienestar el principal argumento para defensa del bien social: agua, sanidad, pensiones... Por eso, lo Público merece el mayor respeto y defensa. ¿Hay mayor intrusismo que la privatización masiva?

Saturday, August 06, 2011

Los mismos de siempre y el gato pardo



La Crónica de León/ 3-08-2011

José Luis García Herrero

Según Wikipedia, que sabe mucho y a veces se equivoca, parece que el gatopardo es traducción errónea y significa realmente “El leopardo jaspeado”: novela escrita por Lampedusa, publicada y después adaptada al cine por Visconti. Hoy el gatopardismo lampedusiano en política práctica es cambiar todo para que nada cambie, paradoja expuesta en la novela. Desde entonces, en comentario político se llama gatopardista o lampedusiano al político que se declara centrista, dialogante, y afirma que modificará una parte de lo hecho, sin precisar qué, para conservar todo lo demás sin que nada cambie realmente. No sabemos qué sucederá después de ese enigmático 20N, aunque nos recuerda aquella frase de Felipe González en su tiempo: “Gato negro o gato blanco, lo que importa es que cace ratones”. Sigue sin saberse su significado, igual que aquella otra sobre la Otan, Nato o cómo quiera se llame ahora, pues cuando se trata de la guerra se califica de Alianza, como en Irak, Afganistán, Libia, etc..., y lo por venir.
Y por seguir entre dudas: cómo llamar a la ciudad de la energía sin energía a Ponferrada cuando se elimine lo poco de empresa pública que queda; caso del importante Grupo II de Endesa en Cubillos.
Pues aunque algunos no lo recuerden, no debe olvidarse que la empresa pública en España tiene larga tradición de prestigio desde el siglo XVIII. Por ejemplo, las Reales Fábricas, que eran empresas públicas, minas y empresas militares para sustituir la iniciativa privada incapaz de industrializar el País. Sin olvidar que objetivos sociales inalcanzables con el mercado libre aconsejaron la propiedad pública de montes, fines recaudatorios de Hacienda y otros mecanismos fiscales. Pero no es hasta después de 1939, finalizada la guerra civil, cuando se crea el INI. Y finalmente, sin entrar en detalles, la privatización total a precio de saldo de todo lo público a favor de los amigos.Ahora serán otros los rostros, los pelos, los gestos, los trajes; pero son los mismos, es lo mismo con diferente letra, música de fondo y de alcantarilla. Y si no que lo demuestren. Veremos qué cosas dicen ellos. Qué casos justifican los mismos de siempre: ellos. Por sus obras los conoceréis.